Fueron encontrados muertos dos de los cuatro ciudadanos estadounidenses baleados y secuestrados la semana pasada al otro lado de la frontera con México están muertos. Los otros dos fueron encontrados vivos, dijo el martes el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
El secuestro tuvo lugar el viernes 3 de marzo en la ciudad de Matamoros, adyacente a la frontera con Estados Unidos. El FBI confirmó que la camioneta, en la que viajaban cuatro personas, recibió disparos y luego sus ocupantes fueron secuestrados.
El presidente Obrador anunció el descubrimiento de los ciudadanos secuestrados de Estados Unidos este martes 7 de marzo en la mañana, hora local. Américo Villarreal, gobernador del estado de Tamaulipas, donde ocurrió el secuestro, explicó que uno de los sobrevivientes resultó herido. Las autoridades no han dicho si los estadounidenses resultaron heridos cuando dispararon contra su automóvil o más tarde cuando estaban en manos de sus secuestradores.
Los miembros del grupo secuestrado fueron identificados como Latavia «Tay» McGee, Shaeed Woodard, Zindell Brown y Eric James Williams. Por ahora, no se sabe quién de este grupo está entre las dos personas que murieron.
En declaraciones a medios de comunicación estadounidenses, la madre de McGee explicó que su hija había ido a México para un procedimiento médico. Estaba acompañada por su primo, Woodard, quien se llevó a dos amigos con él. Anteriormente, los medios informaron que el grupo cruzó la frontera para «comprar medicamentos». Después de cruzar la frontera, dijo la madre de McGee, la mujer la llamó y le dijo que estaba a 15 minutos de la clínica a la que se dirigía. Más tarde, no hubo más contacto con ella.
Confundieron a los estadounidenses con contrabandistas de Haití
Los hallazgos preliminares de los investigadores muestran que los estadounidenses fueron secuestrados por error. Los miembros de uno de los carteles mexicanos presuntamente los confundieron con narcotraficantes haitianos. Según el sitio web, los investigadores determinaron que ninguna de las personas secuestradas tenía antecedentes penales sospechosos.
