El beisbol vive un momento de transformación que busca impactar a varias latitudes. La Confederación Mundial de Beisbol y Softbol (WBSC) ha colocado la primera piedra de un proyecto ambicioso que pretende elevar el protagonismo de este deporte, con la mira puesta en concretar un objetivo muy claro para 2028: organizar cuatro torneos de la Baseball Champions League.
Aunque el proceso no ha resultado sencillo, las autoridades han tomado la decisión de comenzar en el continente americano y, con ello, probar el potencial de la —Baseball Champions League— con el primer torneo en la Ciudad de México durante 2025. La elección de la capital mexicana no fue azarosa.
Con un Estadio Alfredo Harp Helú que destaca por su diseño y modernidad, las condiciones para lanzar este formato están dadas. Ese estadio se ha convertido en un símbolo de pasión y empuje, elementos que la WBSC considera vitales para poner a prueba un modelo que se inspira en eventos de futbol como la Champions League de la UEFA.
Llevar ese concepto al diamante beisbolero es un movimiento audaz, cargado de ilusión y de trabajo colaborativo entre ligas de distintos países.
Un sueño esculpido en años de planeación
El comisionado global de esta iniciativa de la WBSC, Guillermo Ramírez, explica con entusiasmo que todo empezó como una idea que parecía muy lejana. Había barreras, condiciones técnicas y negociaciones pendientes, además de un factor determinante: la agenda de competencia para cada liga de beisbol profesional, con calendarios repletos de partidos.
—“Hemos sudado, reído, llorado y gritado”—, menciona Ramírez con una evidente emoción que refleja la complejidad de la ruta seguida. El comisionado describe cada paso como un capítulo crucial, en el que coincidieron los sueños de directivos y fanáticos.
A lo largo de cinco o seis años, se revisaron acuerdos referentes a traspasos de jugadores y estructuras de calendario, todo con el fin de delinear un torneo que no causara conflictos en las temporadas regulares de cada club. Al final, la voluntad conjunta ganó la partida.
Esto se tradujo en la materialización de un certamen que cumplirá el anhelo de ver a los campeones de distintas ligas continentales enfundados en un duelo sin precedentes.
Primer paso: Baseball Champions League Americas
El escenario de arranque lleva el sello de las Américas. Durante el mes de abril de 2025, se disputará en la Ciudad de México la primera edición de la Baseball Champions League, que en esta ocasión se llamará Champions League Americas.
Participarán seis equipos del continente americano, comenzando con los Diablos Rojos (campeones de verano en México), además de Kane County Cougars (Estados Unidos), Titanes de Florida (Puerto Rico), Leñadores de Las Tunas (Cuba), Tigres de Chinandega (Nicaragua) y Santa María Pirates (Curazao).
La decisión de utilizar “Americas” en el nombre responde al deseo de la WBSC de enfocar los reflectores en la región y demostrar que la pasión por el beisbol no se limita a un solo país. Es un deporte lleno de mística que activa rivalidades y une generaciones en torno a la pelota y el bate. A eso se suma el factor estadístico: los campeones de cada liga conocen la presión de representar a los suyos, incluso fuera de casa.
México, tierra de beisbol y promesas
La afición beisbolera en México siempre ha sido ferviente. Durante las temporadas de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB), los estadios se tiñen de color y júbilo. El Alfredo Harp Helú, casa de los Diablos Rojos, refleja la constante modernización que vive el país en el ámbito deportivo.
Construido con un diseño vanguardista y comodidades de primer nivel, este inmueble no solo es una fortaleza para el equipo escarlata, también es el escenario ideal para una competencia internacional del más alto nivel.
—“No es lo mismo organizar un torneo con 90 o 100 partidos por temporada, que sumarle un evento extra para los campeones”—, explica Ramírez, quien enfatiza que la elección de la CDMX obedece a la capacidad logística, a la infraestructura adecuada y a un público conocedor que respalda los grandes duelos.
Las autoridades locales también han mostrado una apertura total a la iniciativa de la Baseball Champions League, al ver la oportunidad de traer turismo y derrama económica.
El simbolismo del término “Champions”
Para muchos, la palabra “Champions” remite de inmediato a aquellos encuentros memorables de futbol europeo. Año con año, los reflectores apuntan al Real Madrid, al Bayern Múnich o al Manchester City, entre otros, e hipnotizan a las multitudes con juegos intensos. Al llevar esa connotación al beisbol, aparecen varias interrogantes dentro de las juntas de la WBSC y las organizaciones involucradas.
La primera tarea consiste en dotar al torneo de una identidad propia, que seduzca tanto a los conocedores más puristas, como a quienes disfrutan de la emoción sin entrar en complicaciones. Con esa meta, la WBSC planea que la Baseball Champions League despierte una nueva forma de ver este deporte.
Los duelos de “campeón contra campeón” otorgan un sabor distinto, revalorizando el carácter de cada título nacional o regional.
Retos en el calendario y estructura
En el beisbol, los retos estructurales no son un detalle menor. A diferencia de otros deportes, los equipos realizan largos viajes y se ven inmersos en temporadas de más de 90 o 100 juegos, lo que dificulta la organización de competencias adicionales. Se trata de un calendario saturado, con pocas ventanas de descanso.
Para la Baseball Champions League, la WBSC ha buscado soluciones creativas. En la fase inicial —Campeones de América—, se ajustaron los calendarios de verano para que los equipos puedan asistir sin tener que sacrificar rendimiento en sus ligas.
Cada representante deberá cumplir con reglamentos de transferencias de jugadores, alineaciones y otros puntos clave. Esto responde a la intención de fortalecer la transparencia del certamen y de mostrar un nivel competitivo a la altura de un título continental.
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