En una entrevista con Yordi Rosado, Drake Bell compartió detalles inquietantes sobre la obsesión que Brian Peck, entrenador de diálogos de Nickelodeon, desarrolló hacia él durante su trabajo en el canal.
Bell describió cómo Peck se integró demasiado en su vida y comenzó a generar problemas familiares. Mencionó que Peck le decía que su padre le robaba dinero, cuestionaba la presencia de su padre como su representante y afirmaba que los productores no querían que estuviera en el set.
El padre de Drake expresó su incomodidad con la relación entre su hijo y Brian, pero la compañía lo acusó de homofobia por preocuparse.
Según Bell, Peck llevó a cabo conductas obsesivas, ganando un control absoluto. Logró separarlo de su novia y manipuló a Bell para alejarlo de ella, incluso visitando su casa sin motivo y asistiendo a actividades personales.
Además del abuso mental, Drake Bell compartió otras conductas inapropiadas de Peck, como insistir en llevarlo a llamados y audiciones, y tratar de persuadirlo para que escapara con él.
Estas revelaciones arrojan luz sobre la manipulación y el abuso que Bell experimentó a manos de Peck, destacando la importancia de abordar y prevenir tales comportamientos en la industria del entretenimiento.
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