La Presa Libertad, ubicada en el límite de los Municipios de Montemorelos y Linares, es una de las obras más relevantes del Gobierno de Nuevo León para garantizar el suministro de agua a la población. Sin embargo, esta obra, que se presume como la de la cortina más larga de América Latina, tiene serios problemas estructurales que comprometen su viabilidad y su seguridad, pues las grietas en presa en Nuevo León causan preocupación.
Según un reporte de la Coordinación General del Proyecto, dirigida por Jorge Ernesto Macías, la cortina de la presa tiene 545 grietas o fisuras, que en total abarcan 5.5 kilómetros de extensión. De hecho, el documento, con los resultados del diagnóstico fue entregado en noviembre pasado a Juan Ignacio Barragán, director de Agua y Drenaje (AyD) y Luis Carlos Alatorre, director regional de la Conagua. Sin embargo, se presume que la situación podría haber empeorado desde entonces.
Grietas en presa en Nuevo León: Un riesgo para el abastecimiento de agua
La Presa Libertad es una de las principales acciones que impulsa la Administración del Gobernador Samuel García para hacer frente a la crisis hídrica que afecta al Estado. Esta obra tiene una capacidad de almacenamiento de 410 millones de metros cúbicos de agua, que beneficiarían a más de 2 millones de habitantes de la zona metropolitana de Monterrey.
Sin embargo, las grietas detectadas en la cortina de la presa impiden que esta pueda captar agua de forma adecuada y segura. Ante esto, las fuentes que participan en la construcción de la obra alertaron que la reparación de las fisuras será costosa y demorada, por lo que la presa no podrá entrar en operación en el corto plazo.
Las causas de las grietas
Los informantes indicaron que las grietas tienen un ancho que varía de 0.1 a 1.5 milímetros y que atraviesan la cortina de lado a lado, con el riesgo de aumentar su tamaño a medida que avanza la edificación. Por otra parte, según los estudios realizados por AyD y Conagua, las fisuras se originaron por el uso de materiales y técnicas inadecuadas.
Entre las causas que se señalan están el empleo de hasta 70 mezclas diferentes de concreto, la alta concentración de ceniza volcánica, la alta densidad de piedra de río y el uso de varillas deficientes o viejas. Estos factores habrían provocado una mala compactación y una baja resistencia del concreto, lo que generó las grietas en la cortina.
Un llamado especial para la transparencia y la responsabilidad
Ante esta situación, se hace necesario que el Gobierno de Nuevo León informe con transparencia y veracidad sobre el estado de la Presa Libertad y las medidas que se tomarán para solucionar los problemas que presenta. Asimismo, se debe exigir la rendición de cuentas y la sanción a los responsables de las fallas que ponen en riesgo una obra tan importante para el abastecimiento de agua y el desarrollo del Estado.
Descubre más desde Cronista
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.