Para reforzar el actual despliegue operativo que mantiene el personal militar en el estado, e inhibir las actividades de la delincuencia organizada. Arribaron a los municipios de Nuevo Laredo y Matamoros un total de 500 efectivos de fuerzas federales (120 de la Guardia Nacional y 380 del Ejército Mexicano).
De este contingente, se destaca que cien elementos son de Fuerzas Especiales y cien pertenecen a la Brigada de Fusileros Paracaidistas del Ejército Mexicano.
Se informó que el personal de la Sedena arribó vía aérea a los Aeropuertos Internacionales “Quetzalcóatl” de Nuevo Laredo y “General Servando Canales” de Matamoros.
Trescientos efectivos restantes (120 de la Guardia Nacional y 180 del Ejército Mexicano) son integrantes de la Fuerza de Tarea Regional.
La Secretaría de la Defensa Nacional a través de las Comandancias de la IV Región Militar y 8/a. Zona Militar informó que el personal militar que arribó a la frontera tamaulipeca se caracteriza por su gran movilidad, flexibilidad, capacidad de despliegue, armamento, material, equipo y adiestramiento especializado.
Asimismo, señaló la Sedena, están capacitados para desarrollar operaciones interinstitucionales, realizar reconocimientos terrestres, tareas de disuasión, prevención y establecimiento de puestos militares de seguridad, teniendo como fin apoyar las tareas de seguridad que realizan las fuerzas del orden público.
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