El estado de Tamaulipas, México, sufre desde 2009 los efectos de la sequía, un fenómeno que se ha vuelto más frecuente y severo en los últimos años, que plantea una crisis hídrica y que tiene graves consecuencias para la producción agropecuaria de la entidad.
Ante ello, la secretaria de Desarrollo Rural, Pesca y Acuacultura de Tamaulipas, afirmó que la escasez de lluvias ha provocado la reducción drástica de la población ganadera. También, ha provocado la pérdida de superficie agrícola de temporal, que depende exclusivamente de las precipitaciones pluviales.
Una crisis hídrica que se agrava
El secretario estatal de Desarrollo Rural, Antonio Varela Flores, alertó sobre la gravedad de la crisis del agua que enfrenta Tamaulipas. Esta se refleja en los bajos niveles de almacenamiento de las principales presas del estado, que ponen en riesgo la agricultura y la ganadería en general.
Varela Flores también advirtió que, de no haber lluvias significativas, el escenario actual podría perjudicar a más de 1.5 millones de hectáreas dedicadas a la agricultura, tanto de riego como de temporal, en el próximo año. Además, señaló que la situación podría empeorar, comprometiendo aún más las condiciones del suelo y el abastecimiento de agua.
Los datos que preocupan
Según datos de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), hasta octubre de este año, Tamaulipas registraba 13,088 hectáreas afectadas por la sequía. Con ello, se ubica como el sexto estado con más daño a las hectáreas sembradas a nivel nacional. Esta posición desfavorable solo era superada por Chihuahua, Zacatecas, San Luis Potosí, Michoacán y Nuevo León.
El funcionario estatal resaltó que el Distrito 026, que abarca la zona norte del estado, sufrirá escasez de agua debido a la negativa del trasvase de la presa El Cuchillo a la Marte R Gómez. Asimismo, el Distrito 086 tampoco dispondrá de agua proveniente de la presa Vicente Guerrero.
Posibles soluciones y apoyos
Ante esta situación, la Secretaría de Desarrollo Rural está evaluando apoyar a los productores del Distrito 086, cambiando sus opciones de cultivos. Incluso, Varela Flores reconoció la seriedad de la situación, atribuyendo la crisis del agua al cambio climático, al cual considera una realidad con la que la sociedad debe aprender a convivir.
Sin embargo, en Tamaulipas, con un millón y medio de hectáreas agrícolas, la amenaza se cierne sobre cultivos como maíz, sorgo, algodón y otros, poniendo en riesgo toda la producción si no llueve en los próximos días.
Medidas que se están tomando para enfrentar la crisis hídrica
Algunas de las medidas que se están tomando o se proponen por parte del Gobierno regional para enfrentar la crisis son las siguientes:
- Se prevé la perforación de pozos, la distribución de agua mediante camiones cisterna, el mantenimiento de infraestructura, el suministro de cloro y proyectos especiales para garantizar el abastecimiento de agua.
- Se planea mejorar la oxigenación de las lagunas, mediante la apertura de las bocas de barras y el dragado de los cuerpos de agua, para proteger la producción pesquera de diversas especies.
- Se evalúa la posibilidad de cambiar de cultivos en las zonas más afectadas por la falta de agua para el riego, así como brindar apoyos a los productores agropecuarios.
- Se recomienda el uso racional del agua por parte de la población.
Estas son algunas de las acciones que se están implementando o se sugieren para hacer frente a la sequía en Tamaulipas. Sin embargo, la situación subraya la urgente necesidad de abordar los desafíos estructurales en el acceso al agua y la adaptación al cambio climático.
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