La loción facial se ha convertido en uno de los pasos más populares dentro de la rutina skin care, no solo porque es refrescante y limpia nuestros poros de forma profunda, sino porque también se puede aplicar a lo largo del día como aliado ideal contra partículas contaminantes, smog, polvo y más.
Parte del éxito de una loción facial son sus activos; opta por aquellos cuya formulación esté integrada por elementos naturales como aceite de salvia, extracto de algas marinas, hamamelis, hiedra, romero, sábila, mentol y desde luego, Tea Tree Oil, este último es muy importante porque tiene propiedades antisépticas que combate diversas afecciones de la piel causadas por bacterias y hongos como los brotes, la piel grasa y las quemaduras por el sol, etc.
“Aunque hasta hace unos años este paso no era considerado como obligatorio, su uso constante beneficia el mantenimiento de la piel a niveles sorprendentes. La loción facial se caracteriza por tener una textura acuosa y ligera y si tienes piel con tendencia grasa y aún no la añades a tu rutina, la amarás”, dijo Beatriz Magrassi,
El ácido hialurónico es una sustancia que el cuerpo produce de forma natural. Se encuentra en altas concentraciones en las articulaciones, la piel y los ojos.
¿Para qué sirve el ácido hialurónico?
Esta sustancia es importante para la lubricación, la absorción de impactos y la curación de heridas. También ayuda a mantener la integridad de los tejidos y las células. En las articulaciones, el ácido hialurónico ayuda a amortiguar y lubricar los huesos. Esto puede evitar el desgaste de las articulaciones y reducir el dolor asociado a la artritis. En la piel, el ácido hialurónico ayuda a mantenerla hidratada y flexible.
La loción facial remueve suavemente las impurezas de la piel, refresca y refina la textura del cutis, otorgándole un terminado terso, revitalizado y mate que reduce el brillo facial, es ideal para quienes han detectado en su zona T acumulación sebácea y desean matificar su piel para incluso reducir el uso de polvos cosméticos que pueden llegar a bloquear los poros y otra de las maravillas de este paso, es que puedes tener diversas formas de aplicación y obtener diversos resultados:
Aplicando gotas en un algodón y presionando en el brote. Antes de que tortures tu piel pellizcando granitos, aplica unas 10 gotitas de loción en un algodón y presiona por 30 segundos sobre el brote que te molesta, esto ayudará a desinflamar tu piel y controlarlo. Aplicar la loción de forma zonal potencializa su acción.
Pon una cantidad considerable en tus palmas y da pequeños toques por tu rostro. Si estás en la calle y sientes tu rostro pesado, aplica de esta forma tu loción y notarás una hidratación instantánea; además, mantendrás tus poros limpios en lo que llegas a casa para poder hacer tu rutina completa.
Nebulización. Algunos tónicos se envasan en botellas con atomizador y están destinados a rociarse sobre el rostro. Sin embargo, sin una almohadilla de algodón puede ser difícil limpiar los residuos y las impurezas. Aplicar tu loción facial a través de nebulización te ayudará a refrescar la piel y proporcionarle humedad adicional. ¿Sabías que nuestra piel pierde el equivalente a un vaso de agua solo por respirar?
Ahora que sabes las formas más prácticas de aplicar la loción, puedes llevarla contigo a todos lados con la certeza de que tu piel estará protegida, equilibrada y hermosa día a día.
Descubre más desde Cronista
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.